Solo fueron palabras

Mechita Sandoval se encuentra en una situación que había intentado evitar y que, ahora, era una trágica realidad. Sola y triste, en su dormi-torio, piensa en la manera de darle esta noticia a su madre. Enterados de la situación, sus padres toman la decisión de cambiarla de colegio y que estudie el próximo año en otro lugar. Para Mechita, todo se acabó y nada merece ser rescatado de las manos del olvido. Con sus objetivos claros y los problemas que debe superar, emprenderá una nueva etapa en el colegio Virgen de Mercedes. Ahí conocerá a Sofía, Ana y Carmen. Tres amigas que le ayudarán a mirar con entusiasmo el porvenir. A dejar en el pasado lo pasado. A cambiar los malos momentos por otros llenos de alegrías. Sin embargo, ¿todo puede quedar en el pasado? La mayoría de personas suele decir que la mejor etapa de su vida es la época de colegio. Incluso, en los discursos de despedida, los estudiantes recuerdan las principales frases o enseñanzas que se llevan del colegio. Palabras y vivencias que guardarán siempre en su corazón y que serán recordadas una y otra vez en los reencuentros de las promociones. No obstante, ¿todo vale la pena ser recordado? ¿Existen palabras que marcan nuestra vida? ¿Realmente el colegio es la mejor etapa para todos? ¿Mechita deseará reencontrarse con sus amigos?